El auge de las compras online
Imaginá a un consumidor argentino navegando desde su celular. En pocos minutos compara precios, revisa reseñas y compra lo que necesita: alimentos, herramientas, muebles o hasta productos para su jardín. Esta escena, que se volvió cotidiana, refleja una realidad contundente: el comercio electrónico en Argentina sigue creciendo con fuerza.
Según el Estudio MidTerm 2025 de la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE), la facturación del sector alcanzó los $15,3 billones en el primer semestre del año, un 79% más que en el mismo período de 2024. Este crecimiento no solo se traduce en números: son 149,5 millones de órdenes de compra y 203,9 millones de productos vendidos, lo que confirma que el e-commerce se consolidó como un canal de consumo esencial para millones de argentinos.
El avance es tal que el 25% de las ventas totales del país ya se realizan por canales online, y 6 de cada 10 empresas aseguran que su negocio digital creció igual o más que el canal físico. Comprar por internet ya no es una excepción: es parte de la rutina.
Un consumidor más digital, informado y exigente
El comprador argentino de 2025 es mucho más maduro digitalmente que hace unos años. El estudio revela que 9 de cada 10 argentinos ya realizaron compras online, y 7 de cada 10 lo hicieron en los últimos seis meses, alcanzando niveles de actividad similares a los picos de 2020.
Además, el 60% realiza al menos una compra por mes, lo que habla de una frecuencia sostenida y una confianza consolidada. El ticket promedio se ubicó en $102.449, un 23% más alto que el año anterior, impulsado por un consumidor que no solo busca precios, sino también experiencia, conveniencia y servicio.
Las categorías más compradas —alimentos y bebidas, herramientas y construcción, y hogar y jardín— demuestran cómo los productos de uso cotidiano ya dominan el entorno digital. Las personas no solo compran moda o tecnología online: también adquieren lo que usan todos los días.
Pagos y logística: los pilares de una experiencia fluida
El proceso de compra también evoluciona. Si bien las tarjetas de crédito siguen siendo el medio más usado, con un 63% de participación, las billeteras electrónicas protagonizan el crecimiento más significativo, triplicando su uso respecto a 2024. Su adopción se explica por la facilidad de uso, la rapidez de las transferencias y los beneficios financieros que ofrecen.
Por otra parte, 9 de cada 10 empresas ofrecen ventas en cuotas, y el 76% financia en seis pagos o menos, una estrategia que impulsa la conversión y permite a los consumidores acceder a productos más costosos sin fricción.
En términos logísticos, el envío a domicilio sigue siendo la opción preferida, pero el retiro en punto de venta duplicó su participación frente al año anterior. Esta tendencia demuestra que los consumidores valoran la flexibilidad y la posibilidad de elegir cómo y cuándo recibir sus pedidos. La experiencia de compra ya no se limita al producto: incluye cada punto de contacto entre la marca y el cliente.
Nuevas oportunidades y canales en expansión
El ecosistema del e-commerce argentino se diversifica. Aunque los sitios propios de las marcas siguen concentrando la mayor parte de las ventas, los marketplaces ganan protagonismo, especialmente en productos de consumo masivo.
En términos de facturación, las categorías líderes son línea blanca, herramientas y construcción, y accesorios para autos y motos, mientras que el segmento de alimentos y bebidas mantiene un crecimiento constante, reflejando que el consumidor argentino confía cada vez más en comprar sus productos esenciales por internet.
Incluso las compras internacionales muestran señales de expansión: 4 de cada 10 argentinos ya adquirieron productos en el exterior, principalmente a través de plataformas como Mercado Libre, Temu y Shein, que crecieron con fuerza tras las nuevas regulaciones que facilitaron las importaciones online.
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